Enfrentarme a mis miedos fue mi mayor reto, superarlos, la mayor satisfacción.
Cuando duermo a tu lado, mi sueño es profundo y relajado, ¡buenas noches, amor!
Amar va mucho más allá de solo decirlo, demostrarlo a veces hace un gran diferencia entre lo que dices y lo que sientes.
Imagina que la vida es un cuaderno; si tienes que borrar, ¡Hazlo! Pero siempre continúa escribiendo.
Pasan los años y con ellos crece y crece el orgullo que siento por ti, hija mía.
Me siento muy triste por losucedido, y quiero brindartetodo mi apoyo. Lamentomucho tu pérdida.
La razón y el amor son incompatibles, pero al pensar en ti los dos admiten que eres increíble.
Dejé la soberbia de lado gracias a tus enseñanzas, Señor.
Me pregunto cada díaque puedo hacer parallenar el vacío que siento,espero encontrar la respuesta.
Hija mía, mientras yo viva, siempre tendrás a alguien a quien poder acudir.
Sé que eres una mujer segura de ti misma, eso es lo que has demostrado siempre, y pensar en eso te ayudará a seguir adelante.
En los malos momentos miro al cielo y me alegra recordar que te tengo.
Es muy difícil no compartir cada minuto de mis días contigo, pero cuando nos reencontremos los viviremos doblemente.
Solo un beso tuyo puede hacerme volar hasta el cielo. ¡Te amo!
Por fin, ya está aquí mi día favorito de la semana, ¡buenos días, sábado!