Todos los días me despierto y pienso, ¡que orgullo de hijo que tengo!
No importa cuántas veces te equivoques, siempre estaré aquí para aconsejarte, hijo.
No seremos de la realeza, pero tenemos un príncipe en la casa. ¡Tú, hijo!
Te miro y veo al niño más bueno y más cariñoso del planeta, ¡ y es que no imaginas el orgullo que siento por ti, hijo mío!
¿Un amor inmenso por una persona tan chiquita? Quien tiene un hijo puede entenderlo perfectamente, y se llama amor de madre.
Hijo, el día puede estar muy gris, pero yo siempre estaré para darle colores.
Aunque llegue a casa sin energías después de un día duro de trabajo, las saco de donde haga falta para jugar contigo, hijo.
Miro hacia atrás y me emociono mucho al ver todo lo que has alcanzado, hijo mío.
Gracias por enseñarnos a ser mejores padres todos los días ¡Te amamos, hijo!
La vida te traerá diversos cambios, pero hay algo que no cambiará, y es que yo siempre estaré a tu lado para lo que necesites.
Hijito, lo único que quiero es que crezcas feliz, pues te mereces todo.
¿El día más feliz de mi vida? Cuando tú naciste, mi hijito.
Hijito, siempre haré todo lo que este en mi mano, para que nunca te falte de nada.
¿Cómo no amarte? Si te tuve dentro de mí nueve meses, y nuestra conexión continúa intacta.
Hijito, te hablo y te digocuanto te adoro cada día,pues aunque seas unbebé, sé que prontopodrás entenderme.
Pocos sentimientos son tan inmensos como el orgullo que sentimos por nuestros hijos.
Contigo he aprendido mas de lo que podía imaginar. Tu sonrisa me da fuerzas y alegría. Te quiero, ¡hijito!
Hijito, verte reír y feliz ante la vida, es lo que más importa en la mía.
Tenerte fue lo más hermoso de mi vida, acompañarte paso a paso, un orgullo diario.
Hijo no tienes que hacer nada de especial, para mi ya eres un orgullo.