La vida pasa tan rápido como dar un click para tomar una fotografía, entonces dediquemos cada segundo para ser felices.
La vida me enseña y yo le agradezco y aprendo de ella.
La vida me enseña a cada minuto y yo le agradezco dando siempre lo mejor de mi.
Agradecerle a la vida todas las mañanas por haber despertado con salud y felicidad es fundamental.
Amorcito, me encanta imaginarme la vida a tu lado, y pensar en todo lo que ya pasamos. Doy gracias a Dios por tenerte, porque me ames, y porque contigo es todo siempre lindo. ¡Te amo!
A veces todo en la vida va tan deprisa, y tenemos que hacer tantas cosas, que parece que no podemos pararnos ni para tomar aliento.
No sabía lo que era el amor hasta que te conocí y las mariposas en mi estómago me dijeron que eras tú. ¡Te amo!